Camping Globo Barcelona

Hemos estado en temporada baja, septiembre, por lo que había muy poca gente ya que cerraban en 1 semana, pero lo que opinamos es todo positivo: muy buen trato, parcelas correctas, extremadamente limpio, tanto los lavabos como el resto de áreas. Bien situado, el tren cercano casi ni se oye, supermercado Dia a 200 metros. El pueblo no es muy grande, pero está bien. Un camping muy tranquilo.

Leonardo lo mejor del mundo. Muy gentile. Todo lo staff super el lugar sublime

Camping agradable, con parcelas correctas, baños limpios, piscinas estupendas, personal muy agradable, con animación, aunque el precio es alto (casi 80€ la noche, familia de 4 +coche+caravana +luz) No doy 5 estrellas porque por la noche hay ruido por la carretera que está al lado y el paso del tren. Una pena

Está muy tranquilo para mí es una maravilla lo comentó a todo el mundo

Llegamos por la tarde y pasamos solo una noche, aunque solicitamos poder hacer el check out por la tarde, para poder disfrutar de la mañana en la maravillosa playa frente al camping. Cenamos muy bien en el restaurante del camping. Cocina casera y con buenas raciones. El personal muy amable y las zonas comunes muy cuidadas y limpias.

Mala experiencia ,a las ocho de la tarde ya no tienen pan para hacerte un simple bocadillo,el súper casi vacío y encima haces la reserva y cuando llegas te cuentan el rollo que la tarjeta acsi no entra haciendo reservas online y te soplan la pasta o te quedas sin paga y señal,, nunca más volveré muy mala atencion ,si siguen tratando así a las autocaravanas se van a quedar solos ,después se quejan de que pernoctemos fuera ‍♂️

Buena ubicación. Cerca del mar y de la Renfe. Los aseos y duchas están muy limpios y totalmente equipados. Las piscinas hermosas. Ambiente tranquilo. El personal del bar, por algún motivo que desconozco, estresados y maleducados.

El càmping es muy pequeño. En general està bastante bien. No me gustó el paso para ir a la playa, tienes que pasar por un edificio en ruinas que da bastante miedo. En la piscina te obligan a dejar las chanclas en la entrada, cosa que, a parte de que me de cosa andar desclaza por la piscina, resbala mucho el suela y mis hijas resbalaban todo el rato y por el suelo constantemente. La comida del restaurante muy bien, alerta pero con los precios porque no es nada nada barato. Baños correctos.